La receta que os traigo hoy, es de las de aprovechamiento.
Hace unos días publiqué mi receta de Quinoa con Leche. Como ya comenté en el post, era la primera vez que cocinaba la quinoa y no tenía mucha idea de la cantidad de leche que iba a necesitar para prepararla y que quedara con la cremosidad que yo quería. Así que utilicé la misma cantidad de leche que utilizo cuando preparo el arroz con leche: litro y medio.
De ese litro y medio tuve que retirar medio litro para que la quinoa quedara con la textura que debía tener.
Por supuesto ese medio litro de leche aromatizada con el limón, la canela, y ya azucarado no lo iba a tirar. Y como tenía también 3 claras que habían sobrado de una crema pastelera que preparé para otro postre, se me encendió la bombilla y pensé en preparar una riquísima LECHE MERENGADA, un postre "Típical Spanish".
Es una bebida muy nutritiva para los niños. A mis hijas les encantó y ya me están pidiendo que la repita.
Yo aproveché lo que tenía en casa para prepararla, pero por si quieres prepararla directamente aquí te dejo la receta. Es lo más fácil del mundo.
- 1 litro de leche
- la piel de un limón
- una ramita de canela
- 150 o 200 grs de azúcar (según la dulzura que quieras darle)
- 2 claras de huevo.
- canela molida y unas hojitas de menta para decorar
1. Lo primero que tienes que hacer es AROMATIZAR LA LECHE. Para ello pon a calentar en un cazo la leche con el azúcar, la piel de limón y la ramita de canela. Cuando rompa a hervir baja el fuego y déjala cocer unos cinco minutos removiendo de vez en cuando para evitar que la leche se pegue.
2. Transcurrido ese tiempo, retírala del fuego y déjala enfriar antes de meterla en la nevera. Tiene que estar muy fría antes para poder continuar. Retira la ramita de canela y la piel de limón.
3. Bate las claras a punto de nieve. Estarán listas cuando al poner boca abajo el recipiente, las claras no caigan.
4. Incorpora las claras a la leche ya fría.
Yo las incorporé a la leche a mano con unas varillas, pero hay quien lo hace usando la batidora. Puedes hacerlo cómo tu prefiera.
Yo las incorporé a la leche a mano con unas varillas, pero hay quien lo hace usando la batidora. Puedes hacerlo cómo tu prefiera.
De la forma que yo lo hice quedó muy espesita con una capa de espumita por encima.
Se sirve muy fría, espolvoreada con canela molida y con una hojita de menta.
Esta receta es apta para los celíacos pero no para alérgicos a la lactosa o al huevo. No obstante, si tienes alguna de estas intolerancias y quieres tomarte también un vaso de este riquísimo postre, puedes sustituir la leche de vaca, por cualquier bebida vegetal (leche de almendras, leche de soja, leche de coco ...) o por leche sin lactosa; y las claras las puedes sustituir por cualquier nata vegetal montada o nata de coco.
Espero que hagas esta receta y si tienes cualquier duda puedes preguntadme lo que sea a través del formulario de contacto del blog o en mis redes sociales. Te contestaré lo antes posible.
¡Nos vemos pronto!
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