Uno de los básicos de la repostería es la MASA QUEBRADA. Esta masa forma una costra consistente cuando se calienta en el horno y se denomina masa quebrada debido a la textura quebradiza que muestra tras el horneado. Según el relleno y la utilización que se le vaya a dar, se le pueden añadir otros ingredientes como ralladura de naranja o limón, licor, azúcar, incluso agua tibia, según la clase de harina que se utilice.
La masa quebrada básica lleva harina, mantequilla, huevo y una pizca de sal.
Esta receta es la de la masa quebrada tradicional, pero en lugar de utilizar harina normal, la he sustituido por espelta, mucho más saludable y beneficiosa para la salud.
INGREDIENTES:
- 250 grs de harina de espelta 100 % Integral
- una pizca de sal
- 1 huevo
- 125 grs de mantequilla a temperatura ambiente
PREPARACIÓN:
1. Forma un volcán con la harina, sobre la encimera de tu cocina o en un bol.
2. Incorpora la pizca de sal
3. Añade el huevo y amasa para ligarlo con la espelta.
4. Por último, añade la mantequilla y amasa la masa hasta que no se te pegue a las manos. No es necesario añadir más harina.
5. Una vez esté bien amasada, forma una bola con ella y envuélvela en film transparente.
6. Déjala reposar en el frigorífico al menos 30 minutos antes de usarla.
También puedes prepararla con antelación siempre que la conserves en un sitio refrigerado.
Incluso puedes congelarla y sacarla del congelador cuando necesites usarla.
Es una masa muy versátil puesto que la puedes utilizar para preparar platos tanto dulces como salados: tartas, quiches, pies, galletas, canapés ....
Espero que hagas esta receta y si tienes cualquier duda puedes preguntarme lo que sea a través del formulario de contacto del blog o en mis redes sociales. Te contestaré lo antes posible.
¡Nos vemos pronto!
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