No quiero que termine la Semana Santa sin compartir con vosotros estas Torrijas. Éstas son especiales porque no he utilizado pan para prepararlas.
La forma de elaboración es la misma de siempre, pero en lugar de utilizar una barra de pan, o el pan especial que venden he aprovechado lo que sobró de la Tarta de Queso Japonesa (Soft Cotton Cake) que preparé hace unos meses y que tenía congelada. Por cierto después de tres meses en el congelador el bizcocho estaba perfecto.
La única diferencia con las torrijas de pan tradicionales es que al estar hechas de bizcocho la miga empapa mucho más que el pan y quedan mucho más jugosas.
Para que no tengas que buscarla te dejo de nuevo la receta y unos consejillos de la abuela para conseguir unas torrijas PERFECTAS: